Don Jaime de Marichalar ha dado mucho que hablar por su vestuario y ha sabido destacar un estilo de elegancia muy personal y diferente.
Siempre interesado en la moda, llegó a ser consejero de importantes firmas como: Moët Hennessy, Louis Vuitton y Loewe, lo que le valió en su día el sobrenombre de duque de lujo (por Lugo). Le gusta la moda y se le suele ver en algunos desfiles.
Su forma de vestir resulta difícil de clasificar. A veces se acerca a la imagen del dandy por su atrevimiento, pero le falta autenticidad; otras se acerca al caballero inglés aunque vistiendo zapatos y combinaciones de colores de extrema osadía.
Cuando sorprende más es en sus salidas informales. Cuando viste traje o esmoquin, seduce por sus toques de originalidad con corbatas de colores y complementos de lujo, como gemelos de joyería a la última moda.
Cuando se trata de elegir pantalones para un uso más informal o deportivo, ha sido siempre muy atrevido. Estampados en flores azules y blancas y colores llamativos hacen que no pase desapercibido. Uno de sus complementos predilectos es la chalina, y ha llegado a lucir varias combinadas en un conjunto.
Otro aspecto curioso de su vestuario es que muchos de sus abrigos y gabardinas están adornados con pieles.
Curioso que haya gente interesada en la moda pero no en cuidar «la percha». En la primera foto seguro que el traje cuesta más que todo mi armario, pero por Dios, qué mal le queda.